Asi me siento después de lo que me pasó anoche. Los ladrones se entraron a mi casa, y se llevaron mis dos guitarras, mi amplificador, mi teclado y mi procesador de efectos. Me quitaron herramientas valiosisimas para mi expresion, desahogue y terapia de ruido. No es el valor monetario, porque no son instrumentos costosos. No es el valor sentimental, porque no estoy enamorado de un montón de alambres y madera. Es algo más. Es como dejar de ver amigos, compañeros, aliados, compinches.
Sigo como volví al principio, con una guitarra electrica y un bajo, pero sin amplificador. Con una idea y una voz, con ganas de escupirle en la cara y gritarle al mundo todo mi amor y odio. Va a ser complicada la recuperación.
Han pasado otras cosas en el periodo que he dejado de escribir, pero no tengo ganas de comentarlas. Tal vez mas adelante.
domingo, julio 16, 2006
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